El lago de los cisnes es una representación de gran peso dramático. Encuentra en la majestuosidad del ballet el mejor recipiente para darle vida. La música combina diferentes secciones de cuerdas, como en la mayoría de las composiciones para orquesta, con una serie de instrumentos de viento metal y madera. Es muy importante la aparición de las flautas y clarinetes, además de las trompetas y trombones en la obra. Sin dejar de lado, por supuesto, a su sección de percusión.

Todos estos instrumentos son convocados bajo un hilo conductor esplendoroso que va narrando —a través del sonido—, lo que el cuerpo de los bailarines describe con sus movimientos. El breve extracto que escuchamos está cargado de un peso dramático y responde al segundo acto de la obra. En él surge el descubrimiento de Odette, la reina cisne, quien ha sufrido un cruel hechizo que la convierte en cisne durante el día y en humana por la noche. Para su desgracia, solo puede ser rescatada por alguien que nunca haya amado y le jure su amor eterno.

En esta narrativa se mantiene el acto y la música le sirve fielmente para representar ese universo sonoro que se vive en la puesta en escena. Los instrumentos lloran el padecimiento de la pobre Odette; las flautas y clarinetes crean armonías fusionadas con el arpa y pareciesen contarnos una historia de lamento.

La música tiene halos de luz y oscuridad, de tragedia y esperanza. Cada nota de los violines se mezcla con las trompetas y trombones para añadirle dramatismo; pero, así como hay dolor, también hay felicidad y eso lo encontramos constantemente en los cambios que se van sucediendo, uno tras otro, a lo largo de los cuatro minutos de melodía hasta llegar a un desenlace. Es un desenlace risueño que marca el inicio de una posibilidad y esa es Sigfrido tratando de ayudar a Odette.

Este es –apenas- un breve fragmento de una de las más exquisitas obras de la música clásica que puedes descargar en nuestra página web. Si te ha gustado esta increíble melodía, por favor, déjanos un comentario respondiendo la siguiente pregunta: ¿Alguna vez has visto esta representación en el ballet de tu ciudad? ¡Queremos saberlo!