En esta oportunidad quiero pedirte que te concentres en un punto fijo de tu habitación o en cualquier lugar en el que estés. Un único punto fijo mientras suena Fale. Más que una canción, estos sonidos entrecruzados capturan un momento, un pedacito de vida que surge ante nosotros a través de sonidos difíciles de analizar, pero que nos abren la puerta de una profunda introspección.

Fale genera una sensación extraña, como si estuviésemos ingresando a un mundo desconocido pero, al mismo tiempo, que habla de algo muy íntimo, algo que no recordamos o hemos olvidado pero ahora está justo en frente de nosotros.

Si prestamos atención, el inicio abre con una única y solitaria nota emitida por el sonido seco de unos platillos y un par de trompetas y algunos otros instrumentos de viento-metal que resuenan con un poderoso orgullo. Ese primer instante sugiere una pregunta, y aunque el sonido se estira por unos segundos, él mismo se responde pero con una nota más baja a modo de lamento. Debido a esto, podemos deducir que esta es la presentación de algo más, es la muestra magnífica de algo que se acerca y, al quedarnos, aceptamos la bienvenida.

Por ello, casi de forma inmediata, esa melodía se repite un par de veces hasta que un sonido misterioso aparece. De alguna forma este nos remonta a un lugar fantástico, como si alguien hubiese abierto una puerta hacia un mundo inexplorado y nosotros, los oyentes, hemos decidimos entrar con tan solo estar presentes. Ya no podemos escapar; la única salida es hacia adelante.

Así, no más avanzamos por este lugar, unas pulsaciones, que emulan, de alguna forma, los latidos del corazón, aparecen por doquier. Aunque, de hecho, sería más apropiado decir que una única pulsación que sube y baja rítmicamente va marcando el ambiente de este mundo. Ese sonido no es grave ni violento, al contrario, es tranquilizante, acompasado, incluso pareciese fluir al ritmo de nuestra propia respiración y guiar nuestros pasos.

Pero, de pronto, algo cambia por completo la escena. La voz de una mujer o, tal vez, de una niña o un grupo de ellas, irrumpe por encima de las pulsaciones y mantiene una nota alargada, un grito armónico que nos remonta a sentimientos confusos que no podemos explicar. Cada vez que inicia, se introduce en nuestra mente y corazón. No nos suelta. Genera tantas preguntas mientras tratamos de perseguirla que somos incapaces de ubicar su origen o significado. Tal vez no haya ninguno o puede que sea una invitación para que nosotros se lo demos. Sea de una u otra forma, estos gritos gozan de un carácter casi virginal, recuerdan a una selva inmaculada, un paraíso prohibido para los ojos mortales y, por alguna razón, nosotros lo encontramos. Nosotros somos dignos de escucharlo hasta que, de golpe, la pieza muere sin dar explicaciones, dejándonos, si se puede, incluso más preguntas que cuando llegamos hasta ella. Es una música instrumental épica perfecta para youtube o videos de twitch.

Esto tiene una explicación. Fale nos da la sensación de que dura lo que tardamos en respirar profundamente un par de veces. Es corta, compacta, misteriosa e indescifrable. De alguna manera pareciese celebrar la vida, el nacimiento, todo lo que surge entre la oscuridad para dar luz al mundo. Desde la fuerza del sol hasta algo tan pequeño como el corazón de un niño que late y está a punto de nacer. Las voces que escuchamos en este universo podría ser el llanto de esa criatura que intenta nacer, ese ambiente sería el vientre materno y silencio del final podría significar, quizás, su propio nacimiento, el traslado desde este lugar fantástico hacia nuestra realidad. O, tal vez, la respuesta sea más sencilla, tal vez solo es una atmósfera que ha sido creada para envolvernos y la continuación de ella la podríamos encontrar en otras composiciones del increíble Saihate.

Como podrás observar, querido lector, esta pieza hace magia según la persona que la escuche. Eso es un increíble material para trabajar, especialmente si estás buscando música con licencias amigables que se puedan utilizar para ambientar tus trabajos audiovisuales o mundos de videojuegos.

Fale goza de una licencia CC-BY, toda la información de ella la puedes conseguir aquí, pero, en principio, si vas a utilizar esta pieza, recuerda que debes darle la atribución correspondiente a su creador. ¡Da el crédito a su creador, agradece su trabajo y recuerda que puedes descargar música gratis en mp3 en nuestra página y puedes usarla para tus videos youtube o facebook! Tenemos un gran catálogo, visítalo y maravíllate con las opciones.

Si te ha gustado esta canción, respóndenos en los comentarios qué significa para ti este sonido.