Un cello abre la escena. Su sonido se asemeja a una voz pesada, mas no cansada, que resuena con el rugido de diez. No está solo. Su sonido parece demostrar que, tras él, lo acompañan muchos más, quizás miles, tal vez una orquesta, posiblemente el susurro del pesar que se eleva y decide avanzar definitivamente. A este fondo de cuerdas, que produce una base definida y marcada, se agregan, al unísono, instrumentos de viento y percusión en una épica propia que emerge desde las entrañas del lamento y marca, con un ritmo de marcha, pausado y continuo, producido por el sonido del bombo de guerra, el lento caminar del hombre de cara a la adversidad, el destino o la muerte.

Frente a esta base de instrumentos, que se mueven como si fuesen uno solo, y que se muestran sólidos, tan sólidos como es la lucha del ser humano por sobrevivir o mejorar, entra en acción el más bello y significativo de los instrumentos de cuerda pulsada, el piano, con sus notas agudas, un tanto débiles pero libres, que fácilmente podrían llamarse esperanza y que van evocando la posibilidad de alcanzar días mejores, la oportunidad de prestar oído a lo más íntimo de nosotros mismos, la promesa de un futuro mejor. Todo ello mientras invade el instrumental y le da un giro totalmente diferente y con destino al cambio.

Las notas del piano avanzan por encima de todos los instrumentos y esquiva con éxito sus sonidos acongojados. Como si fuese un barco navegando en un mar en tempestad, su sonido crea una atmósfera de determinación con el fin de contar la historia del hombre que todo lo ha perdido o de quien se siente invadido por los pesares, pero que está decidido a enrumbar su camino hacia un lugar mejor, hacia otra realidad lejos de ese mundo triste que ha de ser superado en un lamento silencioso que proviene de todas partes y, al mismo tiempo, de un mismo lugar: la duda propia del ser humano.

Twin Musicom ha volcado en esta pieza breve y poderosa, la épica del hombre que se enfrenta a sí mismo, a su pasado y a su presente para alcanzar un futuro mejor. Su nombre parece labrado en una piedra hermosa y pulida que encaja a la perfección con la intención que construye. Hero’s Theme es un instrumental con el que cualquier persona se puede identificar y que conecta, casi de inmediato, con el oyente: se engancha al pecho, al corazón y se eleva hasta el pensamiento y no lo libera ni por un instante.

Es por esta razón que este soundtrack (música sin copyright)  es ideal para producciones audiovisuales. Puede ser utilizado en escenas épicas que se aproximen al clímax de la producción o en el momento exacto en el que el protagonista ha bajado a la caverna más profunda de sus dificultades y empieza a dar los primeros pasos hacia adelante. La composición y la comunión de los instrumentos crean una atmósfera maravillosa que transmitirá exactamente lo que los personajes están sintiendo en ese momento y ayudará al avance de la trama sin que parezca forzado y sin necesidad de utilizar demasiados diálogos. Por esta razón, si necesitas descargar música de fondo para tu película , para videos youtube no dudes en utilizarla.

Al mismo tiempo, Hero’s Theme no se contenta con la posibilidad de aparecer solo en películas, también encajaría perfecto en videojuegos o cualquier contenido creado para youtube o alguna plataforma de reproducción de video. En sí misma, crea el contexto de la situación y sirve como llamada de atención para el espectador, le hace entender que en este momento algo trascendental está sucediendo y que la atención es vital. Esta pieza es para aquellos que se atrevan a usarla con la intención de permitir que sus creaciones encuentren una voz propia en sus instrumentos, pues, al final del día, solo los valientes se convierten en héroes.